LA RENDICIÓN DE BREDA (VELÁZQUEZ, ¿1635?)
De los 396 millones de hectáreas de suelo cultivable del Brasil, sólo 61 millones se emplean para cultivar grano. A pesar de ello, cinco millones de campesinos no tienen tierra que cultivar. Decenas de miles forman parte del «Movimiento de los sin tierra», que lucha por hacer realidad el sueño de poseer un terreno cultivable.
Durante muchos meses, 2.800 familias ocuparon la plantación Cuiabá hasta que la expropiación de dicha propiedad se finalmente aprobó. Estado de Sergipe, Brasil. 1996.
Durante muchos meses, 2.800 familias ocuparon la plantación Cuiabá hasta que la expropiación de dicha propiedad se finalmente aprobó. Estado de Sergipe, Brasil. 1996.
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Dejo aparcado el comentario sobre estas dos imágenes. De momento, sólo me apetecía colgarlas. Siempre tuve para mí que ambas guardaban concomitancias que se le escapan a mi nula capacidad de relación.
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Tanto tiempo dejo las ideas aparcadas que acaba por llevárselas la grúa. Y es caro y engorroso pagar tantas multas. Menos mal que a veces, quien menos te esperas, viene a echarte una mano. Matallanas ha apuntado que estas dos ilustraciones no tienen, acaso, más que una rima visual. Y eso es todo, porque, como bien señala él, la enseñanza que uno puede obtener del contraste de estos dos símbolos es, precisamente, su radical distancia. La honda brecha que separa el símbolo de una rendición sonrojante y el de un compromiso firme y orgulloso para no detener la lucha hasta que se logre el objetivo: la justicia.
Otro gallo nos cantaría si luchámesos (sólo) azada en mano. Las lanzas, como dice el compañero (y maestro) Matallanas, sólo siembran muerte. Desterrémoslas.
2 comentarios:
Yo creo que la relación es más poética, como que rimán visualmente, pero los 'sin tierra' brasileños creo que no se rendirán nunca.Y las azadas,cuando tienen una tierra para cultivar, dan vida, las lanzas, la quitan... Te recomiento 'A desalambrar' de Víctor Jara, seguro que la conoces...
P.D. Gracias por darme el toque, era vegonzoso ese artículo y voy atropellado, pero no puede ser. No te cortes y dame el toque cuando meta tanto la pata!!!
Me ha gustado mucho esa comparación de las dos fotos; aunque no se dijera nada, únicamente con el pie ya se muestra toda la atención y sensibilidad de quien las ha elegido y colocado como reflexión.
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